Lucentum: los orígenes de la ciudad de Alicante.
Hoy vengo a hablaros de una visita que no os podéis perder si estáis cerca de Alicante y, como a mí, os apasiona la historia: los restos de la antigua ciudad romana de Lucentum.
Lucentum, o Leukante, fue originariamente un asentamiento íbero, ubicado en el Tossal de Manises, del cual se conservan pocos restos datados de finales del siglo V o inicios del IV a.C. La construcción de la ciudad prerromana es atribuida a la intervención de los cartaginenses, concretamente a la familia Barca.
Restos de la ciudad prerromana
Los expertos opinan que la ciudad seguramente fue destruida por los romanos durante la Segunda Guerra Púnica a finales del siglo III a.C. A raíz de esta teoría, surge otra hipótesis relacionada con el cercano Tossal de les Basses.
Tossal de les Bases
Los primeros restos encontrados en el Tossal de les Basses, eran de un asentamiento de origen neolítico. Entre finales del siglo VI a.C. y principios del siglo V a.C, pasa a ser un asentamiento íbero, destacando el crecimiento y prosperidad de la ciudad, hasta que en el siglo III a.C. la población se traslada hasta el cercano Tossal de Manises (Lucentum).
Imagen Google Maps
El motivo de abandonar su asentamiento original, según los expertos, es por la amenaza de los romanos (II Guerra Púnica). No dejéis de leer este fantástico artículo escrito por el gran Pablo Rosser: Tossal de les Basses: 6000 años de historia de Alicante. En él encontraréis toda la documentación y restos arqueológicos hallados, así como hipótesis muy interesantes de lo que pudo pasar, ya que hay vestigios que dan lugar a creer que los íberos pudieron volver al Tossal de les Basses para evitar la romanización.
- Si recordáis mi artículo Alicante: entre leyendas y fantasmas, os hablaba de una visita realizada por la maravillosa Ula de Ula Guides. En esta visita uno de los fantasmas recrea un personaje íbero que nos cuenta qué pudo ocurrir a raíz del ataque romano. Recreado por el magnífico actor Vicente de Ramón Perea, siguiendo una hipótesis de Pablo Rosser a raíz de las pruebas encontradas, el misterio y la magia de esta leyenda recreada en la visita no dejara indiferente a nadie 😉
Volviendo a Lucentum, sabemos que tras el paso de los romanos y con la ciudad prácticamente destruida, los restos de esta quedaron abandonados casi un siglo.
Entre esos restos, podemos ver hoy lo que queda del edificio que albergaba la cisterna de la ciudad: la Casa del patio triangular.
Casa del patio triangular de Lucentum
Se construyó a la vez que la primera fortificación de la ciudad, a finales del siglo III a.C. Se conocen tres estancias, aunque la más importante es la central.
Debajo, hay una cisterna de 4 metros de profundidad con una capacidad de 20.000 litros. El agua era recogida de las lluvias y llegaba al pozo de decantación. De ahí, se distribuía por la ciudad a través de una tubería de cerámica.
Partes de la cisterna (Foto del MARQ)
Con la llegada de los romanos en el siglo I a.C. (bajo el mando del emperador Augusto), la ciudad se reconstruye y comienza a crecer, llegando a obtener el rango de municipio. Es entonces cuando se atestigua históricamente el nombre de Lucentum.
Hasta finales del siglo I d.C., la ciudad goza de esplendor, inaugurando nuevos complejos como el Foro, dos termas, una nueva puerta de acceso al enclave, un sistema de alcantarillado, así como un templo.
El Foro de Lucentum
El Foro de Lucentum se distribuye en dos áreas, separadas por una calle que lo atraviesa. Al Noroeste se emplaza el templo, que cuenta con un edificio anexo (Erario) donde se depositaba el tesoro de la ciudad.
El templo era el lugar de reunión de la Asamblea o Senado municipal.
Al otro lado de la calle, está la plaza, rodeada por pórticos y varios pedestales de estatuas.
Recreación del Foro de Lucentum (Imagen del MARQ)
En la tradición romana, el Foro es el espacio público donde se unen aquellos edificios que albergan los organismos de la vida civil y religiosa de una ciudad romana.
Huellas en la puerta del Foro de Lucentum
Curiosamente, en 1998 se encontraron restos de huellas tanto humanas como de animales (cabra y perro) frente a la puerta de acceso al Foro. Los expertos sugieren que las huellas quedaron marcadas por una lluvia, hacia la segunda mitad del sigo I d.C.
A finales del siglo I d.C., comienza la decadencia de la ciudad. Uno de los principales motivos es el auge de la cercana Ilice (Elche). Con un puerto al abrigo de las corrientes del golfo, el Portus Ilicitus (actual Santa Pola), y enclavado en una de las principales rutas de comercio de la época, hace que la ciudad de Lucentum poco a poco sea abandonada.
¿Qué ocurrió con Lucentum tras el abandono?
Tras ello, el yacimiento será frecuentado esporádicamente, usándose como cantera de materiales para las construcciones que empezaban a levantarse en los alrededores.
Durante esta crisis del siglo III, el Tossal de les Basses vuelve a recuperar el protagonismo de antaño. Pablo Rosser nos cuenta que se encontraron restos de elementos arquitectónicos de una posible basílica cristiana, y, en este yacimiento, se documenta por primera vez la llegada de cristianos a Alicante, a mediados del siglo IV d.C.
En la época alto-medieval (siglo VII e inicios del siglo VIII), se inicia un nuevo tipo de asentamiento en el Tossal de les Basses, la pre-Aldea, que truncara su desarrollo debido a la llegada de los musulmanes, de los cuales hay pruebas arqueológicas de que estuvieron asentados aquí, como enterramientos. En el artículo de Pablo Rosser, Tossal de les Basses: 6000 años de historia de Alicante podréis ver toda esta información mucho mas ampliada y con imagenes.
Entre el siglo VIII y el sigo X d.C., el solar abandonado de Lucentum (Tossal de Manises) será ocupado por los árabes, que construirán en él una maqbara (cementerio musulmán).
En el año 1780, el Conde de Lumieres, Don Antonio Valcárcel Pío de Saboya y Moura, dice haber descubierto en el Tossal de Manises (Albufereta, Alicante), la antigua ciudad de Al-laqant de los antiguos mapas árabes. Efectivamente, descubre los restos de la ciudad musulmana, y, a raíz de ello, se descubre el anterior asentamiento romano: Lucentum.
La maqbara
En la tradición musulmana de la época, la costumbre funeraria era la de depositar el cadáver, seguramente con un sudario, sobre una fosa, y cubrir ésta por losas colocadas con inclinación al noroeste.
Los restos hallados, yacían sobre el costado derecho y mirando al sureste, en dirección a la Meca, y con la cabeza en el suroeste, según el rito islámico.
Enterramientos (Foto del MARQ)
Se encontraron más de 100 tumbas, lo cual indica que había una población extensa. Pero a día de hoy aún no se han hallado indicios de dónde podría haber estado el núcleo urbano.
Más sobre Lucentum
El yacimiento fue declarado Monumento Histórico Artístico en 1961.
He de hacer una mención especial a la arqueóloga sueca Solveig NordStorm, ya que sin su intervención como principal fuerza opositora a un plan urbanístico en el Tossal de Manises, hoy no sería posible visitar los restos de Lucentum.
Para más información sobre Lucentum, no dejéis de visitar el Museo del MARQ y la página del MARQ.
Quiero agradecer también a Ula, de Ula Guides, y a Pablo Rosser, la información y ayuda prestada para hacer este artículo. No dejéis de seguir su página de facebook: Ula Guides. Si os interesa la historia poco conocida de la ciudad de Alicante, con sus visitas ¡podréis hasta vivirla!
